jueves, 30 de octubre de 2014

Arte poética - José Ángel Buesa.

Arte poética.

Ama tu verso, y ama sabiamente tu vida,
la estrofa que mas vive, siempre es la mas vivida.
Un mal verso supera la mas perfecta prosa,
aunque en prosa y en verso digas la misma cosa.

Así como el exceso de virtud hace el vicio,
el exceso de arte llega a ser artificio.
Escribe de tal modo que te entienda la gente,
igual si es ignorante que si es indiferente.

Cumple la ley suprema de desdeñarlas todas,
sobre el cuerpo desnudo no envejecen las modas.
Y sobre todo, en arte y vida, se diverso,
pues solo así tu mente revivirá en tu verso.

José Ángel Buesa nació el 2 de septiembre de 1910, en Cruces, ciudad de la antigua provincia de "Las Villas", actualmente Cienfuegos, Cuba.

Fue llamado "el poeta enamorado" muy popular en Cuba. Al llegar la Revolución Cubana José Ángel Buesa se ve obligado a abandonar la isla al no compartir el pensamiento del gobierno cubano, silenciado por ser considerado "un poeta burgués" y vive en  España, El Salvador, y Santo Domingo donde fallece en 1982.

lunes, 27 de octubre de 2014

"Caserón de tejas" (1941) un poema de Cátulo Castillo - música Sebastián Piana.

Barrio de Belgrano
Caserón de tejas
Te acordás, hermana,
De las tibias noches
Sobre la vereda
Cuando un tren cercano
Nos dejaba viejas,
Raras añoranzas
Bajo la templanza
Suave del rosal

Todo fue tan simple
Claro como el cielo
Bueno como el cuento
Que en las dulces siestas
Nos contó el abuelo
Cuando en el pianito
De la sala oscura
Sangraba la pura
Ternura de un vals

Revivió, revivió,
En las voces dormidas del piano,
Y al conjuro sutil de tu mano
El faldón del abuelo vendrá

Llámalo, llámalo,
Viviremos el cuento lejano
Que en aquel caserón de Belgrano
Venciendo al arcano nos llama mamá

Barrio de Belgrano
Caserón de tejas
Dónde esta el aljibe
Dónde están tus patios
Dónde están tus rejas
Volverás al piano
Mi hermanita vieja
Y en las melodías
Vivirán los días
Claros del hogar.

Tu sonrisa, hermana,
Cobijo mi duelo
Y como en el cuento
Que en las dulces siestas
Nos contó el abuelo
Tornará el pianito
De la sala oscura
A sangrar la pura
Ternura de un vals.

domingo, 26 de octubre de 2014

Domingo de mañana.

Amanece en la ciudad,
el cielo es una llama
que lentamente se va estirando
sobre umbrales y veredas.
Desde un semáforo en rojo
una paloma alza vuelo
hasta un balcón sin flores.
Un vendedor cruza la avenida
cargando una canasta y ofreciendo;
¡Churros crocantes y sabrosos!
El grito se va alejando, hasta ser un susurro,
se pierde.
Un perfume de glicinas
llega como una caricia.
La ciudad va cambiando de color,
se suman las voces,
un anciano pasa silbando un tango,
los aromas se ensamblan
las bocinas aturden
y yo sigo buscando la salida
a este laberinto que es mi vida.

Autora: María Rosa Giovanazzi.
 Blog 

Cuentos y Poesías

http://mariarosag.blogspot.com.ar/2014/10/amanece-en-la-ciudad-el-cielo-es-una.html

viernes, 24 de octubre de 2014

En esta hermosa tierra mía por Andres Zuñiga.

Aquí, en esta geografía plana
De arbusto achaparrado por el viento,
De heladas blancas y de escarcha.

Aquí, en este contrapunto de silencios
De estrellada techumbre celestial,
De gente simple como el tiempo.

Aquí, en esta vastedad inmensa como el cielo
Con la ventisca que silba en los oídos

En la diáfana noche del desierto.

Aquí, en esta tierra que sabe poco de agua
Dura como el alma de un guerrero
Y  suave como manos de mamá.

Aquí germinó la semilla de mi ser
La que sembraron La Ramona y El José
Allá por el noviembre del sesenta y tres.

Aquí hundí mi raíz y mi esperanza
Como el coirón, la jarilla y el neneo
En este oasis a orillas del  Río Negro.

Aquí afiné mi lengua y mi guitarra
Le puse mariposas a mi alma
Y me elevé en el aire hecho canción.

Aquí sufrí la vida y su destierro
Sufrí el amor y su consuelo
Y le hundí mil  puñales al dolor.

Aquí, en esta estepa milagrosa
Fui vida en la sangre de mis hijos
Fui paloma, chimango y libertad.

Aquí, en mi amada tierra rionegrina
Pienso quedarme hueso sin carne
Llanto y recuerdo, olvido y lobreguez.

Aquí renaceré como manzano,
Como átomo en el agua del canal,
Como flor de achicoria en primavera.

Aquí divagaré como fantasma
En las noches de charlas de fogón
Con Meulen, la Calchona  y el Chonchón.

Aquí reposaré tozudamente
Polvo en el polvo, aire en el viento
Por la inconmensurable eternidad.

Aquí. En esta hermosa tierra Mía.

Fuente de información e imagen: http://andreszuniga-escritor.blogspot.com.ar/

jueves, 23 de octubre de 2014

El conscripto de Héctor Gagliardi.

Le sucedió a fulanito,
el nombre no viene al caso,
de veinte años escasos,
de presumir el mocito,
y a pesar de los escritos,
que presento un abogado,
por un año lo mandaron,
a vestirse de conscripto...

La madre se desmayó,
y las hermanas lloraron,
el día que comprobaron,
que el doctor no lo salvó,
y él que siempre se peinó,
con jopo y a dos cepillos,
le pasaron el rastrillo,
y sin melena quedó...

Empezó a comprobar,
de que el sol sale temprano,
y un matecito en la mano,
para poder despegar,
nadie lo viene a sebar,
porque alla no esta la vieja,
que te acaricie la oreja,
para hacerte levantar...

Se le acabó la carne dura,
y que esto me hace mal,
y que tiene poca sal,
y a mi no me den verduras,
porque apretar la cintura,
un día se puede hacer,
pero al trote y sin comer,
se terminan las posturas...

Allí aprendio que el teniente,
no es uno de bigotitos,
que pasa con el autito,
para ver a la de enfrente,
porque ese de repente,
con el grito !cuerpo a tierra!,
hasta Colón te recuerda,
descubriendo el continente...

El no estaba acostumbrado,
a tener que obedecer,
y menos tener que ser,
el petizo de los mandados,
pero sargentos y cabos,
le sacaron en tres días,
la vagancia que tenía,
en el cuerpo acumulado...

El sol le tostó la cara,
y de tanto !sobre el hombro!,
fue notando con asombro,
que el fusil ya no pesaba,
las manitos delicadas,
se le tornaron callosas,
y hacía sonar las baldosas,
cada vez que se cuadraba...

Poco a poco entro a querer,
hasta el sargento primero,
y fué el teniente un compañero,
que lo hacía obedecer,
sin hacerle comprender,
de que era un superior,
y sin notarlo, sintio
cariño por el cuartel...

Y fue una tarde, cualquiera,
que volviendo del campito,
traspirado, tostadito,
y levantada la visera,
sintió nacer esa fiera,
que escondemos en el pecho,
cuando en el mastil derecho,
vio flamear nuestra bandera...

Es que a veces no podemos,
expresar nuestro sentir,
porque es difícil medir,
hasta donde la queremos,
pero por dentro sabemos,
que hasta el alma se agiganta,
cuando pasa azul y blanca,
con los colores del cielo...

miércoles, 22 de octubre de 2014

HOMBRE - JOSÉ LARRALDE (1.969).

No tengo mas fortuna
que estos dos brazos que Dios me ha dao,
si no han tocao la luna
es porque no han probao.
Mis brazos hacen todo
cinchando por un pan bien ganao,
y no le encuentro el modo
paque esten olvidaos.

Y no le encuentro el motivo
y Dios es testigo
que lucho conmigo al pensar,
como lucho sin desgano
si mi propio hermano
me puede olvidar.

Le he preguntao al tiempo
donde lleva el amor el de al lao,
me contestó sonriendo
que se había extraviao.
Me pregunté a mi mismo
donde se habrá refugiao,
lo encontró el egoísmo
y lo tiene encerrao.

Abrí los ojos hemano
no te cegués que vas a sonar
por mas montao que vayas
el tiempo te ha de ganar.
La rodada es pareja
y vos no te habrás de salvar,
pisoteada es la tierra
pero al fin te la da.

Y no le encuentro el motivo
y Dios es testigo
que lucho conmigo al pensar
que reventando al de enfrente
revienta o reviente
vamos a reventar.

domingo, 19 de octubre de 2014

LOS POEMAS DE CÁTULO CASTILLO. AUTOR DEL TANGO "TINTA ROJA" EN LA VERSIÓN DEL URUGUAYO DON ALFREDO ZITARROZA .

Ovidio Cátulo González Castillo nació el 6 de agosto de 1906  y falleció en Paso del Rey el 19 de octubre de 1975 fue un conocido poeta y compositor argentino de tango.
Autor, entre otros, de conocidos tangos como "Organito de la tarde", "Tinta Roja" (1941).

TINTA ROJA
Paredón,
tinta roja en el gris
del ayer...
Tu emoción
de ladrillo feliz
sobre mi callejón
con un borrón
pintó la esquina...

Y al botón
que en el ancho de la noche
puso el filo de la ronda
como un broche...
Y aquel buzón carmín,
y aquel fondín
donde lloraba el tano
su rubio amor lejano
que mojaba con bon vin.

¿Dónde estará mi arrabal?
¿Quién se robó mi niñez?
¿En qué rincón, luna mía,
volcás como entonces
tu clara alegría?
Veredas que yo pisé,
malevos que ya no son,
bajo tu cielo de raso
trasnocha un pedazo
de mi corazón.

Paredón
tinta roja en el gris
del ayer...
Borbotón
de mi sangre infeliz
que vertí en el malvón
de aquel balcón
que la escondía...

Yo no sé
si fue el negro de mis penas
o fue el rojo de tus venas
mi sangría...
Por qué llegó y se fue
tras del carmín
y el gris
fondín lejano,
donde lloraba un tano
sus nostalgias de bon vin.

EL TANGO "TINTA ROJA" EN LA VERSIÓN DEL URUGUAYO DON ALFREDO ZITARROZA .
 
Otras de las obras memorables es el vals Caserón de tejas  con música de Sebastián Piana,  El último café (año 1963, con música de Héctor Stamponi). El tango La calesita que compusiera con Mariano Mores inspiró el filme del mismo nombre dirigido en 1962 por Hugo del Carril y el tango de letra trágica Desencuentro una realidad que pinta de un hombre que le van las cosas y tiene mala suerte.

TANGO DESENCUENTRO POR EDMUNDO RIVERO.


Estás desorientado y no sabés
qué “trole” hay que tomar para seguir.
Y en este desencuentro con la fe
querés cruzar el mar y no podés.

La araña que salvaste te picó
–¿qué vas a hacer?–
y el hombre que ayudaste te hizo mal
–¡dale nomás!–.
Y todo el carnaval
gritando pisoteó
la mano fraternal
que Dios te dio.

¡Qué desencuentro!
¡Si hasta Dios está lejano!
Temblás por dentro,
todo es cuento, todo es vil.

En el corso a contramano
un grupí trampeó a Jesús...
No te fíes ni de tu hermano,
se te cuelgan de la cruz...

Quisiste con ternura y el amor
te devoró de atrás hasta el riñón.
Se rieron de tu abrazo y ahí nomás
te hundieron con rencor todo el arpón.

Amargo desencuentro, porque ves
que es al revés...
Creíste en la honradez
y en la moral,
¡qué estupidez!
Por eso en tu total
fracaso de vivir,
ni el tiro del final
te va a salir.

Su padre José González Castillo, de ideología anarquista, pretendió inscribirlo en el Registro Civil como Descanso Dominical González Castillo, pero como se lo negaron sus amigos le convencieron para que cediera y entonces le anotó con el nombre con el que finalmente pasó a la historia.

Y para el final y cierre María una letra de Cátulo Castillo que son de esos tangos que cuando se lee la letra o se los escucha le descubre algo nuevo…

Acaso te llamaras
solamente María;
no sé si eras el eco
de una vieja canción,
pero hace mucho, mucho,
fuiste hondamente mía
en un paisaje triste
desmayado de amor.

El otoño te trajo
mojando de agonía
tu sombrerito pobre
y el tapado marrón.
Eras como la calle
de la melancolía
que llovía, llovía
sobre mi corazón.

María,
en las sombras de mi pieza
es tu paso el que regresa;
María,
es tu voz pequeña y triste,
la del día que dijiste:
ya no hay nada entre los dos.
María,
la mas mía la lejana,
si volviera otra mañana
por las calles del adiós...

Tus ojos eran puertos
que aguardaban ausentes
su horizonte de sueños
y un silencio de flor
pero tus manos buenas
regresaban clementes
para curar mi fiebre,
desteñidas de amor.

Un otoño te trajo,
tu nombre era María,
y nunca supe nada
de tu rumbo infeliz.
Eras como el paisaje
de la melancolía
que llovía, llovía
sobre la calle gris.



viernes, 17 de octubre de 2014

NO TE RINDAS - MARIO BENEDETTI.

Recibido por facebook.

NO TE RINDAS.
No te rindas, aun estas a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo tambien el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada dia es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estas sola,
porque yo te quiero.

Nota: existen dudas de la pertenencia de este texto a Mario Benedetti.

jueves, 16 de octubre de 2014

Alfa y Omega de Manuel Machado.

MANUEL MACHADO
Alfa y Omega de Manuel Machado.

Cabe la vida entera en un soneto
empezado con lánguido descuido;
y apenas iniciado, ya se ha ido
la infancia, imagen del primer cuarteto.

     Viene la juventud, con el secreto
de la vida, que pasa inadvertido,
y que se va también, que ya se ha ido,
antes de entrar en el primer terceto.

     Maduros, a mirar a ayer tornamos
añorantes y, ansiosos, a mañana...;
y así el primer terceto malgastamos.

     Y cuando en el terceto último entramos,
es para ver, con experiencia vana,
que se nos va el soneto... ¡y que nos vamos!

     Pero cuando logramos
tal vez del Arte el mágico secreto,
si la vida se va, queda el soneto.

Manuel Machado Ruiz (Sevilla29 de agosto de 1874 – Madrid19 de enero de 1947) fue un poeta y dramaturgo español, enmarcado en el Modernismo, y hermano de Antonio Machado.

martes, 14 de octubre de 2014

COMO NACIÓ EL TANGO “INDEPENDENCIA”.

COMO NACIÓ EL TANGO “INDEPENDENCIA”.
El autor de este tango que dio mucho que hablar cada vez que lo tocaba la orquesta de Juan Darienzo allá por 1953, viene de una familia pobre pero siguió los latidos del corazón cada vez que escuchaba algún payador . Más extravagante no pudo ser su nacimiento, ya que fue en 1874 mientras viajaba en un tren que cubría las poblaciones desde Olivos hasta Retiro orillando el río.  ALFREDO BEVILACQUA,  al llegar más o menos a la altura de la estación Belgrano, nació este artista que los periódicos se empeñaron en bautizar “El pasajero sin boleto”.


Bevilacqua entró en la lista de pianistas de la época como Enrique Saborido, Rosendo o Campoamor empezando a componer tangos en la época justa y en momentos en que se organizaba la celebración del centenario de la Independencia Argentina de 1910, compone este tango dedicado especialmente a esta fecha gloriosa. Lo estrenó en plena Avenida de Mayo uniendo en su homenaje a la Infanta Isabel que concurrió representando al Rey de España. Entre aplausos y vítores del público le entrega una placa autografiada a la Infanta que se hallaba reunida con el entonces presidente de los argentinos Figueroa Alcorta.
Fuente de información: http://asolasconeltango.blogspot.com.ar/