Baldomero Eugenio Otto Fernández nació en el porteño barrio de San Telmo un 15 de noviembre de 1886, en Buenos Aires, donde fallece el 7 de junio de 1950.
Poesía, arte, cultura, música. Cuentos y Relatos. Un rincón que nace y crece en la Patagonia Argentina.
sábado, 7 de junio de 2025
BUENO, ¿Y QUÉ? de Baldomero Fernández Moreno.
Tormenta de Baldomero Fernández Moreno.
jueves, 5 de junio de 2025
La casada infiel- Romancero gitano de Federico García Lorca.
La casada infiel- Romancero gitano (1928)
de Federico García Lorca.
Y que yo me la llevé al río
creyendo que era mozuela,
pero tenía marido.
Fue la noche de Santiago
y casi por compromiso.
Se apagaron los faroles
y se encendieron los grillos.
En las últimas esquinas
toqué sus pechos dormidos,
y se me abrieron de pronto
como ramos de jacintos.
El almidón de su enagua me
sonaba en el oído,
como una pieza de seda
rasgada por diez cuchillos
Sin luz de plata en sus copas
los árboles han crecido,
y un horizonte de perros
ladra muy lejos del río.
Pasadas las zarzamoras,
los juncos y los espinos,
bajo su mata de pelo
hice un hoyo sobre el limo.
Yo me quité la corbata.
Ella se quitó el vestido.
Yo el cinturón con revólver
Ella sus cuatro corpiños.
Ni nardos ni caracolas
tienen el cutis tan fino,
ni los cristales con luna
relumbran con ese brillo.
Sus muslos se me escapaban
como peces sorprendidos,
la mitad llenos de lumbre,
la mitad llenos de frío.
Aquella noche corrí
el mejor de los caminos,
montado en potra de nácar
sin bridas y sin estribos.
No quiero decir, por hombre,
las cosas que ella me dijo.
La luz del entendimiento
me hace ser muy comedido.
Sucia de besos y arena,
yo me la lleve del río.
Con el aire se batían las
espadas de los lirios.
Me porté como quien soy.
Como un gitano legítimo.
La regalé un costurero
grande de raso pajizo,
y no quise enamorarme
porque teniendo marido
me dijo que era mozuela
cuando la llevaba al río.
Poema yá publicado.
Carpe diem: puntos de vista Por Fernando Sorrentino.
En el siglo I (a.C.) el poeta romano Horacio escribió Carpe diem, quam minimum credula postero, lo que significa, en modo lato, algo así como “Aprovecha el día, y no confíes demasiado en el futuro”.
Lo cierto es que el carpe diem se convirtió en un tópico literario que desarrollaron, entre tantos poetas de diversas épocas y culturas, nuestros amigos españoles Garcilaso de la Vega (1501-1536, soneto “En tanto que de rosa y azucena”,) y Luis de Góngora (1561-1627, soneto “Mientras por competir con tu cabello”).
Ambos se dirigen, cada cual a su manera, a una muchacha describiendo sus hermosos atributos físicos actuales: rostro, ojos, cabello, cuello, frente, labios…
Una vez que Garcilaso ha enumerado, con sabia serenidad, los bellos atributos de la mujer, consigna la exhortación a aprovecharlos antes que el paso del tiempo haga estragos en su beldad:
”coged de vuestra alegre primavera
el dulce fruto, antes que el tiempo airado…”
Al mismo procedimiento recurre Góngora, aunque con vena más hiperbólica y tremendista, pues su antes que va más allá de la decadencia física y se extiende hasta la total aniquilación, con el contundente nada que da fin a su soneto:
“en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada”.
Haciendo deliberada abstracción del aciago pronóstico con que Garcilaso y Góngora concluyen sus poemas, podemos decir que, al menos, hay cierta “buena onda” en la actitud de aconsejar a la joven que aproveche el momento presente, antes que…
MIRADA SEVERA Y VATICINIOS TRISTES
En cuatro de sus primeros tangos Enrique Cadícamo (1900-1999) desarrolla una especie de, digamos, anticarpediemismo.
Pues, a diferencia de los dos clásicos españoles, se halla lejos de elogiar el carpe diem adoptado como estilo de vida por cuatro despreocupadas señoritas. Veamos…
Che papusa, oí (1927). Una chica terrible:
“Milonguerita linda, papusa y breva,
con ojos picarescos de pippermint,
de parla afranchutada, pinta maleva
y boca pecadora color carmín,
engrupen tus alhajas en la milonga
con regio faroleo brillanteril
y al bailar esos tangos de meta y ponga
volvés otario al vivo y al rana gil”.
Pero debería pensar en el futuro y no dejarse seducir por el presente, puesto que
“Si entre el lujo del ambiente
hoy te arrastra la corriente,
mañana te quiero ver…”
Esta Callejera (1929) es apostrofada:
“Esos trajes que empilchás
no concuerdan con tu cuna,
pobre mina pelandruna
hecha de seda y percal”.
Y, no conforme con ello, se le pinta un futuro atroz:
“Despilfarrás tentación,
pero también, callejera,
cuando estés vieja y fulera
tendrás muerto el corazón.
Seguí nomás, deslizá
tus abriles por la vida,
fascinada y engrupida
por las luces del Pigall,
que, cuando empiece a tallar
el invierno de tu vida,
notarás arrepentida
que has vivido un carnaval”.
Muñeca brava (1929). Reproches sobre el alegre presente:
“Tenés un camba que te hace gustos
y veinte abriles que son diqueros,
y muy repleto tu monedero
pa’ patinarlo de norte a sud…
Te baten todos ‘Muñeca Brava’
porque a los giles mareás sin grupo.
Y pronóstico sobre el infausto futuro:
“Meta champán, que la vida se te escapa,
Muñeca Brava, flor de pecado…
Cuando llegués
al final de tu carrera,
tus primaveras
verás languidecer”.
Pompas de jabón (1925). El maravilloso hoy:
“Pebeta de mi barrio, papa, papusa,
que andás paseando en auto con un bacán,
que te has cortado el pelo como se usa,
y que te lo has teñido color champán.
Que en los peringundines de frac y fuelle
bailás luciendo cortes de cotillón”.
El funesto porvenir:
“Pensá, pobre pebeta, papa, papusa,
que tu belleza un día se esfumará,
y que, como todas las flores que se marchitan,
tus locas ilusiones se morirán.
El mishé que te mima con sus morlacos
el día menos pensado se aburrirá
y entonces, como tantas flores de fango,
irás por esas calles a mendigar…”
TODO ES SEGUN EL COLOR
Garcilaso y Góngora, en lugar de recriminarles sobre el disfrute de la juventud, exhortan a las muchachas a hacer precisamente lo que están haciendo, ante que…
Por el contrario, Cadícamo opina que, puesto que el futuro será nefasto, las jubilosas damas tendrían el deber de no dejarse seducir por los actuales placeres del carpe diem.
Publicado en LA PRENSA.
https://www.laprensa.com.ar/Carpe-diem-puntos-de-vista-560411.note.aspx
Si se calla el cantor de Horacio Guarany.
Si se calla el cantor... calla la vida.
Eraclio Catalín Rodríguez Cereijo, más conocido como Horacio Guarany.
Camilo Blanes Cortés, más conocido por su nombre artístico Camilo Sesto.
sábado, 31 de mayo de 2025
LUNA TUCUMANA - ATAHUALPA YUPANQUI / PABLO DEL CERRO.
LUNA TUCUMANA.
Yo no le canto a la luna
porque alumbra y nada mas,
le canto porque ella sabe
de mi largo caminar.
Ay lunita tucumana
tamborcito calchaquí,
compañera de los gauchos
en las sendas de Tafí.
Perdida en las cerrazones
quien sabe vidita
por donde andaré
mas, cuando salga la luna,
cantaré, cantaré.
A mi Tucumán querido
cantaré, cantaré, cantaré.
Con esperanza o con pena
en los campos de Acheral
yo he visto a la luna buena
besando el cañaveral.
En algo nos parecemos
luna de la soledad:
yo voy andando y cantando
que es mi modo de alumbrar.
'Yo no le canto a la luna, porque alumbra y nada más, le
canto porque ella sabe de mi largo caminar”.
Atahualpa Yupanqui con su sabiduría criticaba a los poetas "alunados", como los llamaba, con esos versos terribles: "de tanto mirar la luna/ ya nada sabes mirar; eres como un pobre ciego/ que no sabe a dónde va" en "El Poeta" porque Don Ata pensaba lo que manifiesta en la zamba "Luna Tucumana": "yo no le canto a la luna/ porque alumbra y nada más; le canto porque ella sabe/de mi largo caminar".
Esta creación suya desde hace
años pasó a ser de la gente "que se la apropió" pues prendió como
pastito seco.
Manuel Machado - Coplas Andaluces.
El 23 de enero de 1949, se registra la zamba «Luna Tucumana»
con el subtítulo «Yo le canto a la luna», con música y letra de Atahualpa
Yupanqui. Esto es lo que figura en SADAIC. Sin embargo, Héctor Roberto Chavero,
hijo de don Atahualpa, sostiene que en esta zamba, también tiene parte como
autora su madre Antonietta Paule Pepin-Fitzpatrick, quien firmaba con el
seudónimo “Pablo del Cerro”.
"Con el tiempo me trajo esta facultad y este montón de
recuerdos, de ideas y las ganas de decirle mi amor, mi cariño y mi recuerdo
permanente a Tucumán, a Acheral y sobre todo a la luna tucumana" -decía Atahualpa Yupanqui-.
La zamba Luna Tucumana de Atahualpa Yupanqui fue declarada
Himno Cultural de la Provincia, por Ley N° 7375.
El 30 de marzo de 2004 el gobierno tucumano decidió adoptar
esta zamba del año 1949 como himno provincial. Su ejecución y canto ha sido
incorporado al protocolo para todos los actos oficiales o escolares.
... ... ...
DON ATAHUALPA YUPANQUI. Héctor Roberto Chavero, verdadero nombre de Yupanqui, nació el 31 de enero de 1908 en el partido bonaerense de Pergamino, en las pampas, provincia de Buenos Aires. Nace en J. de la Peña, paraje Campo de la Cruz fue un hombre de muchos oficios, de esos que se hacen a sí mismos, con sabiduría.
Su madre, Higinia, era de origen vasco; su padre, José
Demetrio Chavero, un humilde funcionario de ferrocarril criollo, que le
bastaron para afirmar al historiar sus orígenes:
“Me galopan trescientos años de América, desde que don Diego
Abad Chavero llegó para abatir quebrachos y algarrobos, a hacer puentes y
columnas para iglesias y capillas”.
Mi agüelo fue carretero,
mi tata fue domador;
nunca se buscó dotor
pues se curaban con yuyos,
o escuchando los murmullos
de un estilo de mi flor.
El destino familiar lo llevó de niño a vivir en Tucumán, en el noroeste argentino que permite ponerse en contacto con la cultura hispanoamericana que marcaría a fuego el ser cantor de las artes olvidadas.
En sus últimos años
opinaba: “Argentina siempre quiso ser universal… Así como un francés es
analfabeto del mundo y erudito en Francia, nosotros somos eruditos en cosas del
mundo y analfabetos en las del país” y agregaba con sabiduría “en China hay
chinos que piensan y hablan en chino. Los húngaros son húngaros y los
franceses, franceses. De esa unidad parten hacia la cultura, hacia el prisma
¿qué pasa con nuestra condición? ¿Cuándo aprenderemos a ser nacionalmente
argentinos?
Falleció en Nimes (Francia) el 23 de mayo de 1992.
Y aunque me quiten la vida
O engrillen mi libertá
Y aunque chamusquen quizá
Mi guitarra en los fogones,
Han de vivir mis canciones
En un alma de los demás.
No me nuembren qu es pecao
Y no comenten mis trinos,
Yo me voy con mi destino
P al lao donde el sol se pierde;
Tal vez alguno se acuerde
Que aquí cantó un argentino.
* Versos de "Coplas del payador perseguido" de
Atahualpa Yupanqui.
... ... ...
Nenette, la compositora “Pablo del Cerro”.
PABLO DEL CERRO. La esposa de Atahualpa Yupanqui, Antonietta
Pepin Fitzpatrick (9 de abril de 1908 - 14 de noviembre de 1990), también conocida
como Nenette (diminutivo de Antonietta), firmaba sus composiciones, incluyendo
aquellas en colaboración con Yupanqui, bajo el seudónimo "Pablo del
Cerro". Eligió ese seudónimo por su nombre (Paule) y por su lugar amado,
Cerro Colorado (en la provincia de Córdoba.
Junto a Don Atahualpa Yupanqui, compuso temas como Indiecito
dormido, El alazán, El arriero, Guitarra dímelo tú, Luna Tucumana (primera
pieza de la dupla compositiva), Chacarera de las piedras, Melodía del
adiós-Danza rústica y muchas más.
65 composiciones figuran a nombre de“Antonieta Paula Pepin”
en la página de SADAIC, de las cuales 37 fueron escritas por la pareja.
Aún así, eso quedó como un detalle oculto detrás de los
prejuicios de la época, que la obligaron a firmar ante la audiencia como “Pablo
del Cerro”.
El seudónimo Pablo del Cerro”, cuenta su hijo Roberto en la
web de Fundación Yupanqui, “lo tomó primero porque en los tiempos en que ella y
mi padre se unieron, mi padre estaba casado pero no divorciado de su primer
matrimonio. Y no estaba bien visto el aspecto de la concubina, no estaba bien
visto además el hecho de que Yupanqui, que ya era Yupanqui, firmara ahora con
una francesa. Todos esos prejuicios que solían haber. Por eso mi madre firmaba
como Pablo del Cerro. Además, fue por el Cerro Colorado, que fue el lugar que
nos albergó en tiempos duros y allí construimos ese rincón donde está el museo
actualmente”.
Generalmente, él escribía una letra y ella la musicalizaba.
Y así como mi madre opinaba sobre las letras, mi padre opinaba sobre algunos
giros armónicos en las melodías, cosa de siempre conservar una buena
literatura, si se quiere, en los textos, y una buena expresión musical, bien
criolla. Así trabajaban ellos.”
Se comunicaban mostrándose las partes: ella al piano, él a
la guitarra. “Mi padre tocaba un poco de piano; las partituras las escribía mi
madre, pero sólo al momento de registrarlas, porque a veces es difícil
transcribir todos los matices guitarrísticos.” En sus momentos juntos, Nenette
y Yupanqui escuchaban a figuras musicales de ambos hemisferios: tanto Edvard
Grieg y Sergei Rachmaninoff como los Hermanos Ábalos o Julio Argentino Jerez.
Recién se casaron por civil e iglesia en 1979, al enviudar Yupanqui de su
primera esposa. Todavía no existía la ley de divorcio.
"Mi padre tocaba un poco de piano; las partituras las
escribía mi madre, pero sólo al momento de registrarlas, porque a veces es
difícil transcribir todos los matices guitarrísticos.” Roberto Chavero, hijo.
Si bien en una carta de 1971, Yupanqui le anuncia a Nenette
que ese sería su último año en Europa, lo cierto fue que resultó su modus
operandi por el resto de su vida. "Acá, en Cosquín, por ejemplo –cuenta
Kolla– que podía cobrar un tercio del cachet de las figuras más
populares." El cansancio se iba acumulando en ambos cuerpos, y las
distancias se sentían más cada vez más."
De lo publicado en Diario Clarín. Viva, 29/11/2021.
Los prejuicios de la época la obligaron a firmar ante la
audiencia como "Pablo del Cerro".
Su nombre era Antonietta Paule Pepin Fitzpatrick, era
francesa y pianista clásica nacida en en la isla de Saint Pierre et Miquelon (San
Pedro y Miquelón) un archipiélago situado en América del Norte, frente a las
costas canadienses de Terranova. Desde 1985 es una colectividad territorial
francesa con un estatuto particular. Por ser una colonia del imperio francés,
Nenette tuvo toda la vida la ciudadanía francesa.
Vivió en la Argentina nuestra. Se estableció en aquella Argentina
próspera y de futuro junto a su padre, en 1928, en la localidad de Villa
Ballester, Buenos Aires.
En 1942 llegó a San Miguel de Tucumán luego de uno de sus
conciertos con la Orquesta Sinfónica Nacional, fue llevada por los
organizadores a escuchar música folklórica del norte argentino.
Así conoció al cantautor argentino Atahualpa Yupanqui
(Héctor Roberto Chavero, 1908-1992), hijo de un santiagueño y una vasca tuvo su
único hijo, Roberto” Koya” Chavero.
Ver en Youtube.
lunes, 19 de mayo de 2025
ROSA BLANCA.
Hijo de padres españoles, de origen humilde.
Fue un político, ensayista, periodista y filósofo cubano,
fundador del Partido Revolucionario Cubano y organizador de la Guerra de
Independencia de Cuba, durante la que murió en combate. Se le ha considerado el
iniciador del modernismo literario en Hispanoamérica. Estudió bajo el cuidado
del poeta Rafael María de Mendive,
A los dieciséis años fue encarcelado por sus ideas
revolucionarias y posteriormente indultado y deportado a España. Continuó su
educación en la Universidad de Zaragoza donde se licenció en las carreras de
Filosofía y Letras y en Derecho, ambas en 1874.
Vivió luego en México y Guatemala, regresando a Cuba de
donde fue nuevamente desterrado en 1879.
Durante su exilio en EE.UU. se dedicó al periodismo y fundó
el Partido Revolucionario Cubano en 1892.
“Entre 1880 y 1890 Martí alcanzaría renombre en América a
través de artículos y crónicas que enviaba desde Nueva York a importantes
periódicos: La Opinión Nacional de Caracas, La Nación de Buenos Aires y El
Partido Liberal de México. Posteriormente decide buscar mejor acomodo en
Venezuela, a donde llega el 20 de enero de 1881. En Caracas fundó la Revista
Venezolana, de la que pudo editar solo dos números. En el segundo número, Martí
escribe un notable ensayo sobre el destacado intelectual Cecilio Acosta que
disgusta al presidente Guzmán Blanco, motivo suficiente para ser expulsado del
país. En Nueva York trabajó para la casa editorial Appleton como editor y
traductor" (Wikipedia).
Como escritor fue el precursor del modernismo latinoamericano,
representado en numerosas obras entre las que se destacan, “Ismaelillo”, “Versos
sencillos” y “Versos libres”.
Fallece en combate en 1895 durante su lucha contra las tropas
españolas en Dos Ríos, actual provincia de Granma, en el oriente cubano.
"La libertad es el derecho que tienen las personas de
actuar libremente, pensar y hablar sin hipocresía".