SEÑOR, NO ME DESPRECIES...
Señor, no me desprecies y conmigo
lucha; que sienta, al quebrantar tu mano
la mía, que me tratas como a hermano,
Padre, pues beligerancia consigo
de tu parte; esa lucha es la testigo
del origen divino de lo humano.
Luchando así comprendo que el arcano
de tu poder es de mi fe el abrigo.
Dime, Señor, tu nombre, pues la brega
toda esta noche de la vida dura
y del albor la hora luego llega;
me has desarmado ya de mi armadura,
y el alma, así vencida, no sosiega
hasta que salga de esta senda oscura.
3 comentarios:
Hermosa poesía, la lucha eterna del hombre entre la carne y el espíritu, y la estampa que acompaña es sublime.
Buena semana.
marairosa
Imposible que no escuche su ruego.
Privilegio el que compartes a Unamano.
Privilegio el paisaje de la portada de tu blog.
Abrazos, Guillermo.
En estos días tan especiales llegue a ti mi cariño con el deseo:
Que siempre tengas palabras cálidas en un frío anochecer,
Una luna llena en una noche oscura,
Y que el camino siempre se abra a tu puerta.
Que los problemas te abandonen, los ángeles te protejan, y que la luz te cubra acunándote.
Para ti y seres queridos Feliz Nochebuena...Feliz Navidad!!!!!
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