Muchacha (Ojos de papel).

Muchacha (Ojos de papel).

Luis Alberto Spinetta.

Muchacha ojos de papel,

¿a dónde vas? Quédate hasta el alba.

Muchacha pequeños pies,

no corras más. Quédate hasta el alba.

Sueña un sueño despacito entre mis manos

hasta que por la ventana suba el sol.

Muchacha piel de rayón,

no corras más. Tu tiempo es hoy.

Y no hables más, muchacha

corazón de tiza.

Cuando todo duerma

te robaré un color.

Muchacha voz de gorrión,

¿a dónde vas? Quédate hasta el día.

Muchacha pechos de miel,

no corras más. Quedate hasta el día.

Duerme un poco y yo entretanto construiré

un castillo con tu vientre hasta que el sol,

muchacha, te haga reír

hasta llorar, hasta llorar.

Y no hables más, muchacha

corazón de tiza.

Cuando todo duerma

te robaré un color.

Voy a ser sincero mucho Spinetta "EL FLACO SPINETTA" no me gustaba en demasía (si tiene muchos temas que sí) pero si fue desde lo musical y lo poético extraordinario. Será que no lo comprendo  en toda la inmensidad de Spinetta aún -puede ser- tiempo al tiempo...

Quizá sea como con el tango que a los 20 es "música de viejos" y a los 40 empieza uno a entender esa maestría del ritmo... como me pasó con Don Ata que a los 15 años decía que "era aburrido" y un contador que vivió por muchos años en Regina me manifestaba que ya lo entendería y acertó el hombre... El tema que más me agrada de esos "redondos" es MUCHACHA (OJOS DE PAPEL) que interpretara por la banda argentina Almendra en los finales de la década de los ´60. Un poema de amor a la muchacha para que se queda hasta el alba porque el tiempo es hoy. Magnifico.

Sueña un sueño despacito entre mis manos
hasta que por la ventana suba el sol.
Muchacha piel de rayón,
no corras más. Tu tiempo es hoy.

Este tema  clásico con una delicadeza poetica, de suavidad. Una de las cosas más hermosas que llega a estremecer, emocionar... esa poética que lograba Spinetta.

Decía Luis Alberto Spinetta: "Siempre he intentado rasgar el alma, emocionar a quien me escuche. Producirle efectos directos en su corazón, en su alma, para movilizarlo y que encuentre respuestas. Tengo total seguridad de que el que está bajoneado puede mejorar. Muchas veces la música puede ayudar a los demás”.

En 1968, con tres de sus compañeros del colegio, Emilio del Guercio, Edelmiro Molinari y Rodolfo García, conformó el grupo “Almendra” que haría historia en la música popular argentina, principalmente por sus letras diferentes, cargadas de metáforas como el tema Muchacha (ojos de papel):  “Sueña un sueño despacito entre mis manos hasta que por la ventana suba el sol... Cuando todo duerma te robaré un color.

"En la época en que empezamos con Almendra, Piazzolla y Los Beatles eran para nosotros verdaderos guías." confesaría Sipnetta.

En una entrevista de Guillermo Quintero y Víctor Pintos, por el año ´84,  contó como nace este tema.
Dice que la Muchacha (ojos de papel) la musa inspiradora fue Cristina Bustamante su primer amor que vivía en el edificio de Emilio del Guercio y lo conocía de vista que se juntaban los fines de semana a conversar en la puerta como simples conocidos. En la casa de Emilio una vez se quedaron solos (sus padres estaban de viaje) e invitaron a las chicas a tomar algo, bailar y confiesa que se sintió enamorado e ineptitud en esas cuestiones  y que, por suerte, fue un amor correspondido. "Fue mi primer amor, mi primer gran amor, inolvidable amor. Y me inspiró una canción"

Le preguntan:

"-¿Vos tenías idea que el tema fuera a golpear tanto en la gente?

-No, porque nada de lo que uno hiciera en ese momento podía tomarse para especular en eso. Pero la canción emocionaba al que la escuchaba, pasaba eso y punto. Y cuando la estrenamos en el Coliseo, fue tan rotundo el éxito de la canción que yo mismo lloraba, no lo podía creer. Aparte, el día que la estrené, por motivo de una rencilla que habíamos tenido, en la mitad de la canción ella se retiró del Coliseo. Yo cantaba la canción y la veía que se iba por el pasillo hacia el fondo. Ese tipo de cosas bien de pubertad, de 18 años. Amor.

-No debe haber mejor halago para una mujer que su amado le dedique una canción. Y tratándose de una canción como Muchacha, no me es difícil imaginar cómo se habrá sentido Cristina...

-Es cierto. Se dio vuelta. Aparte, ella la conocía de antes, yo se la había cantado para ella en forma personal. Pero cuando le arreglamos todos los coros y la estrenamos en vivos, fue tremenda la emoción que sentí. Imborrable. Yo lloraba arriba del escenario, porque sentí que toda la gente se conmocionaba con eso. Al instante. Después vino el éxito. Sentí que la canción traspasaba la gente, lo mismo que cuando estrené Plegaria o Figuración, Muchacha traspasaba la gente. Con Almendra me cansé de ver chicos y chicas llorando, de emoción o de felicidad."

MUCHACHA (OJOS DE PAPEL).