LA VIDA ES TAN SENCILLA...
de Gabriel Celaya.
La vida es tan sencilla que se explica por sí misma,
se basta a sí misma.
¡Mira! Todo está hecho. Todo está ya dado.
Nos basta aceptar
o quizá —somos humanos— alabar
y cantar
a lo que nos maquina sin dejarse pensar.
Todo está aquí. ¿No lo ves?
No hay razón ni más allá.
¡Somos felices! Vivimos los instantes explosivos
de alegría o de dolor, de rabia o de amor,
y si no
es que estamos distraídos, aburridos.
No hay nada que esperar. No hay nada que temer.
También la muerte
llegará cuando nos sea fielmente necesaria
y la recibiremos con verdadera ansia.
Desde que nacimos
nos estamos preparando para que nos consuma.
Consejo mortal.
Levanta tu edificio. Planta un árbol.
Combate si eres joven. Y haz el amor, ¡ah, siempre!
Mas no olvides al fin construir con tus triunfos
lo que más necesitas: Una tumba, un refugio.
Rafael Gabriel Juan Múgica Celaya Leceta, conocido como
Gabriel Celaya había nacido en Hernani,
Guipúzcoa el 18 de marzo de 1911. Fue un célebre poeta vasco.
Se codeó con los intelectuales más destacados conoció a
Federico García Lorca, Luis Buñuel, Salvador Dalí, Ortega y Gasset, Miguel
de Unamuno, Juan Ramón Jiménez, entre otros.
Fallece en Madrid el18 de abril de 1991, hace 30 años, éste poeta español de la generación literaria de posguerra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario