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lunes, 3 de febrero de 2025

Poema a la eñe de Gloria Fuertes.

 


Poema a la eñe

de Gloria Fuertes.

Todo tiene eñe en España,

¡hasta España!

Eñe el coño o la cigüeña que nos trae,

eñe la cizaña o la guadaña que nos lleva,

eñe la niña que nos enfría,

eñe la leña que nos calienta.

Eñe la caña con que pescamos,

eñe del paño que nos alienta,

eñe de moño que aún baila jota,

eñe de maña que maña ostenta,

eñe de uña que nos araña,

eñe extremeña.

Eñe de caño de fuente,

eñe de cuña que injerta,

eñe de añicos,

eñe de mierda

o eñe de niño, que somos todos,

los que aún latimos con un poema.

Gloria Fuertes (Madrid, 28 de julio de 1917 – Madrid, 27 de noviembre de 1998).

La ENE también es gente.

LA EÑE TAMBIÉN ES GENTE.
La culpa es de los gnomos que nunca quisieron ser ñomos. Culpa tienen la nieve, la niebla, los nietos, los atenienses, el unicornio. Todos evasores de la eñe. ¡Señoras, señores, compañeros, amados niños! ¡No nos dejemos arrebatar la eñe! Ya nos han birlado los signos de apertura de interrogación y admiración. Ya nos redujeron hasta el apócope. Ya nos han traducido el pochoclo. Y como éramos pocos, la abuelita informática ha parido un monstruoso # en lugar de la eñe con su gracioso peluquín, el ~. ¿Quieren decirme qué haremos con nuestros sueños? ¿Entre la fauna en peligro de extinción figuran los ñandúes y los ñacurutuces? ¿En los pagos de Añatuya como cantarán Añoranzas? ¿A qué pobre barrigón fajaremos al ñudo? ¿Qué será del Año Nuevo, el tiempo de ñaupa, aquel tapado de armiño y la ñata contra el vidrio? ¿Y cómo graficaremos la más dulce consonante de la lengua guaraní? "La ortografía también es gente", escribió Fernando Pessoa. Y, como la gente, sufre variadas discriminaciones. Hay signos y signos, unos blancos, altos y de ojos azules, como la W o la K. Otros, pobres morochos de Hispanoamérica, como la letrita de segunda, la eñe, jamás considerada por los monóculos británicos, que está en peligro de pasar al bando de los desocupados después de rendir tantos servicios y no ser precisamente una letra ñoqui. A barrerla, a borrarla, a sustituirla, dicen los perezosos manipuladores de las maquinitas, sólo porque la ñ da un poco de trabajo. Pereza ideológica, hubiéramos dicho en la década del setenta. Una letra española es un defecto más de los hispanos, esa raza impura formateada y escaneada también por pereza y comodidad. Nada de hondureños, salvadoreños, caribeños, panameños. ¡Impronunciables nativos! Sigamos siendo dueños de algo que nos pertenece, esa letra con caperuza, algo muy pequeño, pero menos ñoño de lo que parece. Algo importante, algo gente, algo alma y lengua, algo no descartable, algo propio y compartido porque así nos canta. No faltará quien ofrezca soluciones absurdas: escribir con nuestro inolvidable Cesar Bruto, compinche del maestro OskiNiniossueniosotonio. Fantasía inexplicable que ya fue y preferimos no reanudar, salvo que la Madre Patria retroceda y vuelva a llamarse Hispania. La supervivencia de esta letra nos atañe, sin distinción de sexos, credos ni programas de software. Luchemos para no añadir más leña a la hoguera donde se debate nuestro discriminado signo. Letra es sinónimo de carácter. ¡Avisémoslo al mundo entero por Internet! La eñe también es gente.
María Elena Walsh.

 María Elena Walsb. Diario brujo. Buenos Aires, Espasa. 1999. pp.149-151.

viernes, 10 de enero de 2025

El señor Juan Sebastián / María Elena Walsh.


El señor Juan Sebastián. 

No son los ángeles que cantan,
no son los pájaros ni el mar,
es un señor lleno de cielo
el señor Juan Sebastián.

Hace muchísimos inviernos
que, lloriqueando en alemán,
nació entre fusas y corcheas
el señor Juan Sebastián.

Era chiquito y las canciones
que le enseñaba su papá
las repetía para siempre
el señor Juan Sebastián.

Era gordito y con peluca,
indispensable como el pan
y cascarrabias a menudo
el señor Juan Sebastián.

Soñando en órgano y en clave,
a su país angelical
llevaba a príncipes y a pobres
el señor Juan Sebastián.

Está contándonos un cuento
que no terminará jamás.
Dios le dictaba el argumento
al señor Juan Sebastián.

María Elena Walsh (Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires, 1º de febrero del 1930 - Buenos Aires, 10 de enero del 2011).

martes, 17 de octubre de 2023

El 45 de María Elena Walsh.


El 45 
de María Elena Walsh.

Te acordás hermana qué tiempos aquellos,
la vida nos daba la misma lección.
En la primavera del cuarenta y cinco
tenias quince años lo mismo que yo.

Te acordás hermana de aquellos cadetes,
del primer bolero y el té en El Galeón
cuando los domingos la lluvia traía
la voz de Bing Crosby y un verso de amor.

Te acordás de la Plaza de Mayo
cuando «el que te dije» salía al balcón.
Tanto cambió todo que el sol de la infancia
de golpe y porrazo se nos alunó.

Te acordás hermana qué tiempos de seca
cuando un pobre peso daba un estirón
y al pagarnos toda una edad de rabonas
valía más vida que un millón de hoy.

Te acordás hermana que desde muy lejos
un olor a espanto nos enloqueció:
era de Hiroshima donde tantas chicas
tenían quince años como vos y yo.

Te acordás que más tarde la vida
vino en tacos altos y nos separó.
Ya no compartimos el mismo tranvía,
sólo nos reúne la buena de Dios.

miércoles, 6 de septiembre de 2023

Vana historia de María Elena Walsh.


Vana historia
de María Elena Walsh.

Si no recuerdo mal, todo cabía
entre los horizontes de un pañuelo.
Entonces figuraba el mediodía
un sol con ojos en mitad del cielo.

Y gracias a una tierna hechicería
la noche prodigaba su consuelo
con tanta caridad que uno veía
las estrellas tiradas en el suelo.

Pero hoy el agua no lo dice. Es cierto:
ya no se pone un corazón dorado
ni roba añiles a la golondrina.

Porque el mundo hechizado está desierto.
Qué dolor, sobre él se ha desatado
el Miedo con sus trapos de neblina.

domingo, 3 de septiembre de 2023

Serenata para la tierra de uno de María Elena Walsh.


Serenata para la tierra de uno
de María Elena Walsh.

Porque me duele si me quedo
pero me muero si me voy,
por todo y a pesar de todo, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

Por tu decencia de vidala
y por tu escándalo de sol,
por tu verano con jazmines, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

Porque el idioma de infancia
es un secreto entre los dos,
porque le diste reparo
al desarraigo de mi corazón.

Por tus antiguas rebeldías
y por la edad de tu dolor,
por tu esperanza interminable, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

Para sembrarte de guitarra,
para cuidarte en cada flor
y odiar a los que te castigan, mi amor,
yo quiero vivir en vos.

viernes, 30 de septiembre de 2022

LA FEMINISTA de María Elena Walsh.

 


LA FEMINISTA

(Un poema de María Elena Walsh).
Sucede que ya no aguanto
que en la calle me grités
a la primera de cambio:
"¡Tenías que ser mujer!"
Soy mujer y me equivoco
pero vos, ¿quién te creés?
¿Valentina la astronauta,
Evita, sor Juana Inés?
Sos el león de la Metro,
mucha porra y poco rey.
No me vengas con rugidos
que no hay selva por acá
y no soy ninguna fiera
ni la mona de Tarzán.
Yo fallo por accidente
y no por fatalidad.
Cuando agarre la manija
no sé si lo haré tan mal
como ustedes, que arremeten
gobernando marcha atrás.
Conmigo te equivocaste
de programa y de canal.
Me tomaste por tu abuela
que aguantó sin pestañear.
Si tenés el monopolio
del acierto universal
yo te dejo vía libre
pero vos, dejame en paz.
Y cuando las papas quemen
¡arreglate sin mamá!

* Publicado en Revista y Editorial
SUDESTADA - Facebook.
#RevistaSudestada

domingo, 8 de mayo de 2022

Requiem de Madre de María Elena Walsh.

 


Requiem de Madre

de María Elena Walsh.

Aquí yace una pobre mujer

Que se murió de cansada.

En su vida no pudo tener

Jamás las manos cruzadas.

De este valle de trapo y jabón

Me voy como he venido,

Sin más suerte que la obligación,

Más pago que el olvido.

Aleluya, me mudo a un hogar

Donde nada se vuelve a ensuciar.

Nadie me pedirá de comer

En mi última morada

No tendré que planchar ni coser

Como condenada.

Cantan ángeles alrededor

De la eterna fregona

Y le cambian el repasador

Por una corona.

No lloréis a esta pobre mujer

Porque se encamina

A un hogar donde no hay que barrer,

Donde no hay cocina.

Aleluya esta pobre mujer

Bienaventurada,

Ya no tiene más nada que hacer

Y ya no hace nada.

viernes, 4 de febrero de 2022

Estación Claridad – María Elena Walsh.

 


Estación Claridad – María Elena Walsh.

No hay túnel que dure cien años,
mi vida.
Mira como se arruga la tiniebla,
la procesión de pálidas se desbarranca, los funcionarios inauguran ruinas.
Y vos y yo fundamos aires buenos.

Dónde estará la plata de mi río,
sólo barro y olitas de minué.
En los camalotes cantan sirenas, pero Ulises camionero no las oye,
sólo escucha la radio.

Llueve liquen en los decrépitos televisores,
buenas noches a todos,
mariposas y difuntos.
Transmiten en cadena las cadenas.

El cemento se cansa de ser cobija de la Pampa.
Por los baches asoma la luz mala,
resucitan cardos y maíces,
abran paso las luciérnagas curiosas que verán.

Viento sur, olor a transparencia, silbo de la calandria,
madrecita cantora del primer rayo de la aurora.

La sopa de los pobres llega al centro,
y su vapor al reino de los cielos.

Ventolina que barre tormentas, lavadero del alma,
nos deja serenitos, reciclando la pena en vasto amor.
Silbo de la calandria y vidalita de la
esperanza.

Darle cuerda al amanecer, empujar un poco al Sol,
al buen día meterlo en casa.
Silba la calandria y nos sorprende en vela,
amuchados, con ganas de seguir.

Estación claridad vamos llegando.

martes, 11 de enero de 2022

Las estatuas - María Elena Walsh.


Cuando llueve me dan no sé qué
las estatuas.
Nunca pueden salir en pareja
con paraguas,
y se quedan como en penitencia,
solitarias.

Señalando la fatalidad
en las plazas,
miran serias pasar cochecitos
y mucamas.
No se ríen porque no tuvieron
nunca infancia.

Marionetas
grandes, quietas,
con ellas no juega nadie.
Pero si una sombra mala
para siempre las borrase,
qué dolor caería
sobre Buenos Aires.

Cuando llueve y me voy a dormir
las estatuas
velan pálidas hasta que llegue
la mañana,
y del sueño de los pajaritos
son guardianas.

Su memoria procuran decir
sin palabras
y nos piden la poca limosna
de mirarlas
cuando quieren contarnos un cuento
de la Patria.

domingo, 21 de marzo de 2021

Otoño, la estación más linda de la región por Néstor Tkaczek.

¿Es el otoño la estación más linda en la región? Para mí, sí; aunque como dice el dicho: “contra gustos, no hay disputa”. Resulta prodigiosa la transformación del paisaje en los valles del norte patagónico. La paleta de colores que nos regalan los árboles, especialmente en el inicio de la estación es infinita, verdes, amarillos, ocres, marrones y todas las variedades intermedias que por torpeza cromática no puedo referir.
La estación comienza con el equinoccio de otoño, que no siempre coincide con el 21 de marzo, y marca que en esa fecha el día y la noche duran exactamente lo mismo. Al parecer nuestra palabra proviene del latín tardío “autumnus”, que significaba algo así como: “llegada de la plenitud del año”; seguramente porque marcaba el final del ciclo de la naturaleza, también porque muchos productos se cosechaban durante el otoño. Por eso la luna llena más cercana al inicio del otoño es llamada en muchos lugares “luna de cosechas” por su brillantez que permite trabajar aun de noche.
Desde hace un tiempo se celebra el 21 de marzo el día de la poesía, (con toda la polémica que suponen los “días de…”), en el supuesto caso de que la poesía tuviese un día. Pero es bueno recordar algunos versos de poetas insignes dedicados al otoño.
El primer poeta que viene a mi memoria es Homero y la “Ilíada” y aquel verso único. “como las generaciones de las hojas, así la de los hombres”; también Neruda y su célebre poema N°6: “Te recuerdo como eras en el último otoño./Eras la boina gris y el corazón en calma. /En tus ojos peleaban las llamas del crepúsculo. / Y las hojas caían en el agua de tu alma.” La inconfundible María E. Walsh le dedicó una de sus canciones a, “El señor otoño” que andaba haciendo travesuras: “A los arbolitos de la plaza/ un sobretodo de oro les compró, / y pintó la tarde con mostaza/ aunque el sol le decía que no”. Y Mario Benedetti nos dice: “Aprovechemos el otoño/ antes de que el invierno nos escombre/ entremos a codazos en la franja del sol/ y admiremos a los pájaros que emigran…”.
Eso don Mario, aprovechemos el otoño.

Publicado en el Diario "Río Negro", domingo 21 de marzo del 2021. 

https://www.rionegro.com.ar/otono-la-estacion-mas-linda-de-la-region-1736571/

domingo, 10 de enero de 2021

He militado largamente en oscurísimos recintos ... de María Elena Walsh.

He militado largamente
en oscurísimos recintos
de donde traigo una batalla
que no se termina nunca.
Estoy en guerra casi todo el tiempo
y espero que me gane una paloma.

La verdad es que también sirvo
para desordenarlo todo.
Con qué cuidado precipito
planillas en la primavera,
y alterando sensatos equilibrios
me dan lo mismo números que grillos.

No faltaría a la modestia
si dijera que siempre estuve
muy dotada para el olvido.
Guardo volúmenes de ausencia,
antologías de temblor marchito,
catálogos de dudas y neblinas.

He trabajado anteriormente
en invisibles oficinas
llenas de crisis apiladas
y documentos vegetales,
donde los pájaros me habilitaron
con un diploma de mirarlos siempre.

Diré también para abreviar
que estudio lágrimas modernas
y pienso publicar un libro
de suspiros cuando me muera,
y que tengo por todo patrimonio
un montón de relámpago vigente.

Todos estos antecedentes
animan a solicitar
que me permitas ocuparme
en derrumbar sobre tus manos
la dulzura que pongo inútilmente
sobre manteles de confiterías.

Quiero por fin tener empleo
de suavísima permanencia
adentro de tu corazón,
coser con lágrimas y arrimo
toda fatalidad que te amenace
con botones caídos o desgracias.

Quiero servirte de costumbre
y que utilices lo que soy
para fundar una sonrisa
o ceremonias con pañuelos,
o para siempre, o para lo que quieras,
desde un copo de nieve hasta el amor.

María Elena Walsh.

viernes, 28 de agosto de 2020

La clara fuente À la claire fontaine (canción tradicional francesa) María Elena Walsh.




Al agua de una fuente
un día me acerqué
buscando la frescura
para calmar mi sed.

Te quise toda la vida
y nunca te olvidaré.

Debajo de una encina
me adormecí después.
Un ruiseñor cantaba
acompañandomé.

En lo alto de una rama
cantaba por placer.
Ay, quién tuviera el alma
del ruiseñor aquel.

Alguien ya no me ama
por culpa de un clavel
que me pedía siempre
y nunca le corté.

Cuando el clavel marchito
florezca como ayer,
será posible entonces
que me ames otra vez.

sábado, 30 de mayo de 2020

EN EL PAIS DE NOMEACUERDO EL PAIS DE NOMEACUERDO de María Elena Walsh.


EN EL PAIS DE NOMEACUERDO
EL PAIS DE NOMEACUERDO
de María Elena Walsh.
En el país de no me acuerdo,
 doy tres pasitos y me pierdo;
 un pasito para allí,
 no recuerdo si lo di,
 un pasito para atrás,
¡Ay qué miedo que me da!
En el país de no me acuerdo,
doy tres pasitos y me pierdo;
un pasito para atrás,
y no doy ninguno más,
porque ya… ya me olvidé,
donde puse el otro pié.
En el pais del no me acuerdo
Doy tres pasitos y me pierdo…

sábado, 17 de noviembre de 2018

El juglar de MARIA ELENA WALSH.


Que suene la flauta,
que ruede la danza
y vuelvan los días
de Maricastaña.
Yo soy Juan Derramasoles,
juglar de España.


Traigo un oso amaestrado
y un gorro de cascabel
donde sonar la moneda
que me dé Vuestra Merced.
Pobre soy, lo perdí todo
menos el hambre y la sed.

Yo canto lo que sucede
y lo que no puede ser:
hazañas de por ahora,
leyendas de por ayer.
Yo soy aprendiz de río,
voy de entonces a después.

A mi antigua primavera
ya me vuelvo, ya me voy.
He cantado para siempre,
la esperanza me mandó.
Quien me busque por el tiempo
me hallará en el ruiseñor.

miércoles, 13 de diciembre de 2017

Vana historia de María Elena Walsh.

Vana historia
de María Elena Walsh.
Si no recuerdo mal, todo cabía 
entre los horizontes de un pañuelo. 
Entonces figuraba el mediodía 
un sol con ojos en mitad del cielo. 

Y gracias a una tierna hechicería 
la noche prodigaba su consuelo 
con tanta caridad que uno veía 
las estrellas tiradas en el suelo. 

Pero hoy el agua no lo dice. Es cierto: 
ya no se pone un corazón dorado 
ni roba añiles a la golondrina. 

Porque el mundo hechizado está desierto. 
Qué dolor, sobre él se ha desatado 
el Miedo con sus trapos de neblina.

domingo, 17 de septiembre de 2017

Canción del jacarandá de María Elena Walsh y Ramón “Palito” Ortega.

Canción del jacarandá
de María Elena Walsh 
y Ramón “Palito” Ortega.

Al este y al oeste
llueve y lloverá
una flor y otra flor celeste
del jacarandá.

La vieja está en la cueva
pero ya saldrá
para ver qué bonito nieva
del jacarandá.

Se ríen las ardillas,
ja jará jajá,
porque el viento le hace cosquillas
al jacarandá.

El cielo en la vereda
dibujado está
con espuma y papel de seda
del jacarandá.

El viento como un brujo
vino por acá:
con su cola barrió el dibujo
del jacarandá.

Si pasa por la escuela,
los chicos, quizá,
se pondrán una escarapela
del jacarandá.


Esta canción fue escrita por el popular Ramón "Palito" Ortega y la grandiosa Maria Elena Walsh y grabada por los dos. Primero la grabo "Palito" en 1966 y luego María Elena Walsh para su disco "El pais de nomeacuerdo" en 1967.

jueves, 14 de septiembre de 2017

Balada de Cómodus Viscach - María Elena Walsh.


En este mundo traidor
transigir es lo mejor.
El que diga basta
va a parar a la canasta,
y el que sea opositor
va a parar al asador.

En chimangos prepotentes
no malgastes los cartuchos.
Sonreíle a los de arriba
que son machos y son muchos.

Esperá el escalafón
trabajando de felpudo.
Es mejor que comas tierra
y no que te coman crudo.

No olvidés el autobombo
si querés ponerte en venta.
Lo que tengas que pensar,
no lo pienses por tu cuenta.

Defendé la rebelión
que no altere la rutina:
el poeta en la leonera,
la mujer en la cocina.

A mal tiempo, buena cara:
rinde mucho, poco cuesta;
no te pongas en la pica
con canciones de protesta.

A buen tiempo, mala cara:
da cartel de inteligente;
criticá todo con todos
menos con los dirigentes.