miércoles, 31 de enero de 2018

DICEN LAS PAREDES/2 de Eduardo Galeano - El libro de los abrazos (1989).

DICEN LAS PAREDES/2 de Eduardo Galeano - El libro de los abrazos (1989).

En Buenos Aires, en el puente de La Boca:
Todos prometen y nadie cumple. Vote por nadie.
En Caracas, en tiempos de crisis, a la entrada de uno de los barrios más pobres:
Bienvenida, clase media.
En Bogotá, a la vuelta de la Universidad Nacional:
Dios vive.
Y debajo, con otra letra:
De puro milagro.
Y también en Bogotá:
Proletarios de todos los países, uníos!
Y debajo, con otra letra:

(último aviso).

lunes, 29 de enero de 2018

BAILARÉ CON JACINTA LA PELIRROJA - José Moreno Villa.

BAILARÉ CON JACINTA LA PELIRROJA.

Eso es, bailaré con ella
el ritmo roto y negro
del jazz. Europa por América.
Pero hemos de bailar si se mueve la noria,
y cuando los mirlos se suban al chopo de la vecina
Porque, —esto es verdad—
rito exige su capilla.
¿No, Jacinta?
Oh, Jacinta, pelirroja, peli-peli-roja
pel-pel-peli-pelirrojiza.
Qué bonitos, qué bonitos, oh, qué bonitos
son, sí, son, tus dos, dos, dos, bajo las tiras
de dulce encaje hueso de Malinas.
Oh, Jacinta,
bien, bien mayor, bien supremo.
Ya tenemos el mirlo arriba,
y la noria del borriquillo, gira.

sábado, 27 de enero de 2018

Manifiesto de Nicanor Parra.


Manifiesto
de Nicanor Parra.


Señoras y señores
Ésta es nuestra última palabra.
–Nuestra primera y última palabra–
Los poetas bajaron del Olimpo.

Para nuestros mayores
La poesía fue un objeto de lujo
Pero para nosotros
Es un artículo de primera necesidad:
No podemos vivir sin poesía.

A diferencia de nuestros mayores
–Y esto lo digo con todo respeto–
Nosotros sostenemos
Que el poeta no es un alquimista
El poeta es un hombre como todos
Un albañil que construye su muro:
Un constructor de puertas y ventanas.

Nosotros conversamos
En el lenguaje de todos los días
No creemos en signos cabalísticos.

Además una cosa:
El poeta está ahí
Para que el árbol no crezca torcido.

Este es nuestro mensaje.
Nosotros denunciamos al poeta demiurgo
Al poeta Barata
Al poeta Ratón de Biblioteca.
Todos estos señores
–Y esto lo digo con mucho respeto–
Deben ser procesados y juzgados
Por construir castillos en el aire
Por malgastar el espacio y el tiempo
Redactando sonetos a la luna
Por agrupar palabras al azar
A la última moda de París.
Para nosotros no:
El pensamiento no nace en la boca
Nace en el corazón del corazón.

Nosotros repudiamos
La poesía de gafas obscuras
La poesía de capa y espada
La poesía de sombrero alón.
Propiciamos en cambio
La poesía a ojo desnudo
La poesía a pecho descubierto
La poesía a cabeza desnuda.

No creemos en ninfas ni tritones.
La poesía tiene que ser esto:
Una muchacha rodeada de espigas
O no ser absolutamente nada.

Ahora bien, en el plano político
Ellos, nuestros abuelos inmediatos,
¡Nuestros buenos abuelos inmediatos!
Se retractaron y se dispersaron
Al pasar por el prisma de cristal.
Unos pocos se hicieron comunistas.
Yo no sé si lo fueron realmente.
Supongamos que fueron comunistas,
Lo que sé es una cosa:
Que no fueron poetas populares,
Fueron unos reverendos poetas burgueses.

Hay que decir las cosas como son:
Sólo uno que otro
Supo llegar al corazón del pueblo.
Cada vez que pudieron
Se declararon de palabra y de hecho
Contra la poesía dirigida
Contra la poesía del presente
Contra la poesía proletaria.

Aceptemos que fueron comunistas
Pero la poesía fue un desastre
Surrealismo de segunda mano
Decadentismo de tercera mano,
Tablas viejas devueltas por el mar.
Poesía adjetiva
Poesía nasal y gutural
Poesía arbitraria
Poesía copiada de los libros
Poesía basada
En la revolución de la palabra
En circunstancias de que debe fundarse
En la revolución de las ideas.
Poesía de círculo vicioso
Para media docena de elegidos:
“Libertad absoluta de expresión”.
Hoy nos hacemos cruces preguntando
Para qué escribirían esas cosas
¿Para asustar al pequeño burgués?
¡Tiempo perdido miserablemente!
El pequeño burgués no reacciona
Sino cuando se trata del estómago.

¡Qué lo van a asustar con poesías!

La situación es ésta:
Mientras ellos estaban
Por una poesía del crepúsculo
Por una poesía de la noche
Nosotros propugnamos
La poesía del amanecer.
Este es nuestro mensaje,
Los resplandores de la poesía
Deben llegar a todos por igual
La poesía alcanza para todos.

Nada más, compañeros
Nosotros condenamos
–Y esto sí que lo digo con respeto–
La poesía de pequeño dios
La poesía de vaca sagrada
La poesía de toro furioso.

Contra la poesía de las nubes
Nosotros oponemos
La poesía de la tierra firme
–Cabeza fría, corazón caliente
Somos tierrafirmistas decididos–
Contra la poesía de café
La poesía de la naturaleza
Contra la poesía de salón
La poesía de la plaza pública
La poesía de protesta social.

Los poetas bajaron del Olimpo.

miércoles, 24 de enero de 2018

A los 103 años murió Nicanor Parra, el poeta de la Antipoesía.


"EPITAFIO".

“De estatura mediana,
 Con una voz ni delgada ni gruesa,
 Hijo mayor de profesor primario
 Y de una modista de trastienda;

Flaco de nacimiento
Aunque devoto de la buena mesa;
De mejillas escuálidas
Y de más bien abundantes orejas;

Con un rostro cuadrado
En que los ojos se abren apenas
Y una nariz de boxeador mulato
Baja a la boca de ídolo azteca

-Todo esto bañado
Por una luz entre irónica y pérfida-
Ni muy listo ni tonto de remate
Fui lo que fui: una mezcla
De vinagre y aceite de comer
¡Un embutido de ángel y bestia!”


COPLAS DEL VINO.

Nervioso, pero sin duelo
A toda la concurrencia
Por la mala voz suplico
Perdón y condescendencia.

Con mi cara de ataúd
Y mis mariposas viejas
Yo también me hago presente
En esta solemne fiesta.

¿Hay algo, pregunto yo
Más noble que una botella
De vino bien conversado
Entre dos almas gemelas?

El vino tiene un poder
Que admira y que desconcierta
Transmuta la nieve en fuego
Y al fuego lo vuelve piedra.

El vino es todo, es el mar
Las botas de veinte leguas
La alfombra mágica, el sol
El loro de siete lenguas.

Algunos toman por sed
Otros por olvidar deudas
Y yo por ver lagartijas
Y sapos en las estrellas.

A los 103 años murió Nicanor Parra, el poeta de la Antipoesía. El ganador del Premio Cervantes 2011 formó parte de una de las familias creativas más importantes de la historia de Chile. 
El reconocido poeta chileno Nicanor Parra murió este martes a los 103 años dejando como herencia la “antipoesía”,  con la que generó la revolución de la literatura hispanoamericana en el siglo XX y le permitió ganar el premio Cervantes en el 2011.

"Chile pierde a uno de los más grandes autores de la historia de nuestra literatura y voz singular en la cultura occidental. ¡Estoy conmovida por el fallecimiento de Nicanor Parra! Mi más profundo pésame a su familia", dijo la presidenta Michelle Bachelet, en su cuenta oficial de Twitter. 

Considerado un influyente poeta del siglo XX, Parra falleció por la madrugada del martes en su casa en la comuna de La Reina, en Santiago, por problemas de salud que no fueron precisados, pero estuvo consciente hasta el final de su vida.

Poeta, físico y matemático, Nicanor Parra saltó a la fama por su máxima creación: la antipoesía, generó con el que instauró un lenguaje caracterizado por la ironía, el léxico simple y los temas cotidianos, con los que alcanzó una gran influencia en la literatura hispanoamericana y varios reconocimientos internacionales.

La principal muestra de este movimiento queda plasmada en su segundo libro, "Poemas y antipoemas" (1954). Desde ese momento, su prolífica obra siguió con libros como "Antipoemas" (1960), "Manifiesto" (1963), "Obra Gruesa" (1969), "Poesía política" (1983), "Poemas para combatir la calvicie" (1993), "Páginas en blanco" (2001).

En 2011 recibió en España el premio de Literatura Miguel de Cervantes, el más reconocido de la lengua castellana. Parra decidió no viajar a recibir el galardón por su avanzada edad y envió a su nieto Tololo Ugarte, un destacado pianista.

Asimismo, recibió también el Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo (1991) y el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2001).

 "Lo único que le faltaba a Nicanor Parra para ser inmortal era precisamente haber dejado este mundo", dijo, por su parte, el presidente electo Sebastián Piñera, quien presentaba su gabinete ministerial al mismo tiempo que se conocía la noticia del fallecimiento de Parra.

- Antagonista a Neruda -.
Su extravagante personalidad, reflejada en irónicas opiniones y picarescas odas a objetos y situaciones comunes, acercó su obra especialmente a los jóvenes, entre los que hoy cuenta muchos admiradores.

Reacio al contacto con la prensa y los homenajes, pasó sus últimos años en su casa en Las Cruces, en la costa central chilena, no lejos de la que tenía Pablo Neruda en Isla Negra, donde recibió a algunas personalidades como la presidenta Bachelet, con quien celebró sus 100 años de vida.

Su irreverente obra y rechazo a la poesía tradicionalista transformó a Parra en antagonista del trabajo de su colega chileno y premio Nobel de Literatura en 1971, Pablo Neruda, con quien tuvo una relación especial.

Durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) Nicanor Parra fue señalado por mantener una postura ambigua con el régimen, alimentada por sus disputas públicas con Neruda, militante del partido comunista que murió a los pocos días de la llegada de los militares al poder, por causas que aún son investigadas.

- Familia de artistas -.
Nicanor Parra nació en 1914 en la localidad rural de San Fabián de Alico, en la región de Biobío (sur), en la más fecunda cuna artística que ha tenido Chile.

Parra era el hermano mayor de la famosa cantautora Violeta Parra, y de Eduardo y Roberto, otros dos músicos relevantes de la música popular chilena.

El ramal artístico de la familia Parra se extendió durante los años y ha dado numerosos talentos como Ángel Parra, hijo de Violeta, otro gran cantautor que murió en París el año pasado a los 73 años.

Su hijo, Angel Cereceda Parra, fue fundador del exitoso grupo chileno Los Tres, y es reconocido como uno de los grandes guitarristas de Latinoamérica. 

La trampa de Nicanor Parra.
Por aquel tiempo yo rehuía las escenas demasiado misteriosas.
Como los enfermos del estómago que evitan las comidas pesadas
Prefería quedarme en casa dilucidando algunas cuestiones
Referentes a la reproducción de las arañas,
Con cuyo objeto me recluía en el jardín
Y no aparecía en público hasta avanzadas horas de la noche;
O también en mangas de camisa, en actitud desafiante,
Solía lanzar iracundas miradas a la luna
Procurando evitar esos pensamientos atrabiliarios
Que se pegan como pólipos al alma humana.
En la soledad poseía un dominio absoluto sobre mí mismo,
Iba de un lado a otro con plena conciencia de mis actos
O me tendía entre las tablas de la bodega
A soñar, a idear mecanismos, a resolver pequeños problemas de emergencia.
Aquellos eran los momentos en que ponía en práctica mi célebre método onírico,
Que consiste en violentarse a sí mismo y soñar lo que se desea,
En promover escenas preparadas de antemano con participación del más allá.
De este modo lograba obtener informaciones preciosas
Referentes a una serie de dudas que aquejan al ser:
Viajes al extranjero, confusiones eróticas, complejos religiosos.
Pero todas las precauciones eran pocas
Puesto que por razones difíciles de precisar
Comenzaba a deslizarme automáticamente por una especie de plano inclinado,
Como un globo que se desinfla mi alma perdía altura,
El instinto de conservación dejaba de funcionar
Y privado de mis prejuicios más esenciales
Caía fatalmente en la trampa del teléfono
Que como un abismo atrae a los objetos que lo rodean
Y con manos trémulas marcaba ese número maldito
Que aún suelo repetir automáticamente mientras duermo.
De incertidumbre y de miseria eran aquellos segundos
Es que yo, como un esqueleto de pie delante de esa mesa del infierno
Cubierta de una cretona amarilla,
Esperaba una respuesta desde el otro extremo del mundo,
La otra mitad de mi ser prisionera en un hoyo.
Esos ruidos entrecortados del teléfono
Producían en mí el efecto de las máquinas perforadoras de los dentistas,
Se incrustaban en mi alma como agujas lanzadas desde lo alto
Hasta que, llegado el momento preciso,
Comenzaba a transpirar y a tartamudear febrilmente.
Mi lengua parecida a un beefsteak de ternera
Se interponía entre mi ser y mi interlocutora
Como esas cortinas negras que nos separan de los muertos.
Yo no deseaba sostener esas conversaciones demasiado íntimas
Que, sin embargo, yo mismo provocaba en forma torpe
Con mi voz anhelante, cargada de electricidad.
Sentirme llamado por mi nombre de pila
En ese tono de familiaridad forzada
Me producía malestares difusos,
Perturbaciones locales de angustia que yo procuraba conjurar
A través de un método rápido de preguntas y respuestas
Creando en ella un estado de efervescencia pseudoerótico
Que a la postre venía a repercutir en mí mismo
Bajo la forma de incipientes erecciones y de una sensación de fracaso.
Entonces me reía a la fuerza cayendo después en un estado de postración mental.
Aquellas charlas absurdas se prolongaban algunas horas
Hasta que la dueña de la pensión aparecía detrás del biombo
Interrumpiendo bruscamente aquel idilio estúpido,
Aquellas contorsiones de postulante al cielo
Y aquellas catástrofes tan deprimentes para mi espíritu
Que no terminaban completamente con colgar el teléfono
Ya que, por lo general, quedábamos comprometidos
A vernos al día siguiente en una fuente de soda
O en la puerta de una iglesia de cuyo nombre no quiero acordarme.

martes, 23 de enero de 2018

EN EL PAÍS DE LA LIBERTAD - LEÓN GIECO (1.973).

Búsquenme donde se esconde el sol,
Donde exista una canción.
Búsquenme a orillas del mar
Besando la espuma y la sal.

Búsquenme, me encontrarán
en el país de la libertad.
Búsquenme, me encontrarán
en el país de la libertad,
de la libertad.

Búsquenme donde se detiene el viento
Donde haya paz o no exista el tiempo,
Donde el sol seca las lágrimas
De las nubes en la mañana.

Búsquenme, me encontrarán
En el país de la libertad.
Búsquenme, me encontrarán
En el país de la libertad,
De la libertad.


EN EL PAÍS DE LA LIBERTAD - LEÓN GIECO.





domingo, 21 de enero de 2018

Yolanda de Pablo Milanés (1.970).

Yolanda  
de Pablo Milanés.

Esto no puede ser no más que una canción;
quisiera fuera una declaración de amor,
romántica, sin reparar en formas tales
que pongan freno a lo que siento ahora a raudales.
Te amo,
te amo,
eternamente, te amo.

Si me faltaras, no voy a morirme;
si he de morir, quiero que sea contigo.
Mi soledad se siente acompañada,
por eso a veces sé que necesito
tu mano,
tu mano,
eternamente, tu mano.

Cuando te vi sabía que era cierto
este temor de hallarme descubierto.
Tú me desnudas con siete razones,
me abres el pecho siempre que me colmas
de amores,
de amores,
eternamente, de amores.

Si alguna vez me siento derrotado,
renuncio a ver el sol cada mañana;
rezando el credo que me has enseñado,
miro tu cara y digo en la ventana:
Yolanda,
Yolanda,
eternamente, Yolanda.

viernes, 19 de enero de 2018

Madrigal aéreo - Guillermo de Torre (1900 – 1971).

Panorama vibracionista
galería de máquinas
Dínamos
Una corona de hélices
magnífica testa de
FÉMINA PORVENIRISTA
Hacia qué hemisferio nordestas tu brújula cardiaca?
Un circuito de ardentías
se polariza en tus ojos iónicos
Sobre las nubes velivolantes
tu móvil cuerpo se diversifica
en transmutadoras perspectivas
El cable sinusoide de tus brazos
Se desenrolla sobre tus senos cúbicos
Un motor se espeja en tu iris meditativo
Tu luminosa psiquis intelectiva
deviene una mariposa aviónica
que se eleva sobre los opacos gineceos
y en tu obsesión geométrica
evocas voluptuosamente
la carnal perpendicular
bisectriz de tu divino triángulo
Oh la vibración de tus diástoles
que transfundes al lucífero afín
en una ósmosis erótica!
Tálamos en las antenas
Andróginos mecánicos
Oh Fémina porvernirista!
En mi espasmo augural
te he poseído arrullándote
al ritmo de las hélices sidéreas.

Guillermo de la Torre fue un ensayista, poeta y crítico literario y de arte español perteneciente a la Generación del 27.
En 1938, fundó, junto a Gonzalo Losada, Attilio Rossi, Amado Alonso, Pedro Henríquez Ureña, entre otros, la Editorial Losada, que constituyó un hito en la industria editorial de toda Iberoamérica.

Sus restos descansan en el Cementerio de La Recoleta, de Buenos Aires, junto a los de su mujer, Norah Borges, y a los de su suegra, Leonor Acevedo Suárez. Fue cuñado de Jorge Luis Borges.

miércoles, 17 de enero de 2018

MACEDONIA de NICANOR PARRA.



Un joven periodista
Cree reconocer a Borges
En la rambla de Montevideo

Perdone señor
                    Es Ud. Borges?
Y el venerable anciano respondió:
A veces…

Así era Borges
Una vez alguien tocó el timbre
De su modesto dpto de Buenos Aires

Quién?
          pregunta Borges
Un desconocido de unos 30 años de edad, Sr Borges
Le contesta su secretario

Y el venerable anciano exclamó:
Cómo!
¿Que todavía queda gente de 30 años?

Un curioso se le acercó una vez en la calle:
Perdone Sr. Borges
Le podría hacer una pregunta?
Ya la hizo
          respondió Borges
Y apuró el paso

martes, 16 de enero de 2018

IMAGEN DE MI PADRE - NICANOR PARRA.

Yo tenía un fiel amigo
de lento mirar cansado
triste como un jardinero
y puro como un relámpago.

Tenía las manos suaves
como el corazón de un pájaro
al andar casi danzaba
y hablaba casi cantando.

Como ríos paralelos
vagábamos por los campos
yo lo confundía a veces
con la sombra de algún árbol.

El cielo que lo cubría
no podía ser más alto
y el nardo azul de su alma
no podía ser más nardo.

Si hubiera sido de agua
¡qué compañero tan claro!
serenos como sus ojos
nunca se verán dos lagos.

Amigo dulce dormido
que nunca será olvidado
ni en el día en que se cierren
para mí todos los astros.