martes, 21 de septiembre de 2021

Rasguña las piedras. Canta: Sui Generis.



Detrás de las paredes
Que ayer te han levantado
Te ruego que respires todavía
Apoyo mis espaldas
Y espero que me abraces
Atravesando el muro de mis días
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
A mí
Apenas perceptibles
Escucho tus palabras
Se acercan las bandas de rock and roll
Y sacuden un poco
Las paredes gastadas
Y siento las preguntas de tu voz
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
A mí
Y si estoy cansado de gritarte
Es que sólo quiero despertarte
Y por fIn veo tus ojos
Que lloran desde el fondo
Y empiezo a amarte con toda mi piel
Y escarbo hasta abrazarte
Y me sangran las manos
Pero qué libres vamos a crecer
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
A mí, más a mí
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
Y rasguña las piedras
A mí.

Sui Generis fue el dúo acústico muy popular e importante dentro de la historia del Rock Nacional Argentino.

Sui Generis (del latín "único en su tipo") fue un dúo argentino de rock formado por Charly García (piano, guitarra acústica y voz) y Nito Mestre (flauta, guitarra acústica y voz) en 1969. Nacido de grupos juveniles en el Barrio de Caballito en la Capital Federal.

El tema “Rasguña las Piedras” es una canción escrita por Charly García e interpretada  por Sui Generis  grabada en 1973 e incluida en el álbum Confesiones de invierno del mismo año.

Esta canción fue grabada en Adiós Sui Géneris, Parte II.

En el año 2002 la revista Rolling Stone y la cadena MTV la consideraron como la tercera mejor canción de todos los tiempos del rock argentino. La canción también forma parte de la banda de sonido de la película La noche de los lápices.

El 5 de septiembre de 1975, Sui Generis cerró su carrera con un concierto en el estadio Luna Park. Sin embargo, las entradas se agotaron rápidamente y se tuvo que programar una segunda función.

En ese concierto se grabó el material incluido en los álbumes Adiós Sui Géneris, parte I y parte II. 

Bien vale la pena volver a publicar Rasguña las piedras.

No hay comentarios: