miércoles, 21 de marzo de 2012

LA OMA ES UNA MUJER.

"LA OMA" es un popular Chamamé que tiene "la marca" de "Los 4 de Córboba" con letra de Daniel Altamirano y música de Pedro Favini.
Oma significa abuela en alemán, en nuestra Argentina sobre todo en la mesopotamia o en la región chaqueña, a todas las abuelas de procedencia o descendencia alemana, polaca, suiza, húngara o ucraniana, se las llama así. Pero, una mujer, quedó inmortalizada como “La Oma” gracias una afamada canción del folclore popular argentino.

"LA OMA"
La Oma es una mujer
de setenta y pico de años
vive en el norte chaqueño
cerquita de San Bernardo.


Tiene los ojos azules
como el agua de los mares
porque vino de muy lejos
y al río le dio su sangre.

Hay que entrar por las picadas
para llegar a su rancho
de barro y apuntalao
con quebracho colorao
lleno de arboles el patio
y herramientos de trabajo
una volanta, un arao
y el paisaje del Chaco.
La Oma es feliz con poco
digamos mejor con nada
la Oma era rubia y se ve
que era linda alemana.

Que sola que esta la Oma
pero ella no piensa en nada
como pensar en la muerte
si la Oma es como un hada.

En su ranchito de barro
calienta a leña su pava
conversa con su lorito
que es con el único que habla.

Hay que entrar por las picadas.

Marta Hoffner de Rabe, "La Oma".
LA HISTORIA

Marta Hoffner, era brasileña, nació el 12 de octubre de 1907 y era la quinta hija de un matrimonio de alemanes, vivía en Santa Catalina un estado del sur de Brasil, fundado por alemanes y suizos. En ese lugar conoció a Armando Rabe, que había llegado desde Alemania a ese sitio junto a su familia, escapando de la guerra, en busca de paz y prosperidad. Pero para los Rabe la vida en Brasil fue difícil , por eso decidieron encaminarse al oeste, pasaron por Uruguayana, cruzaron el río Uruguay, anduvieron por Corrientes y continuaron con su trayecto, hasta que finalmente llegaron a Charata (San Bernardo) en la Provincia de Chaco, allí se establecieron y consiguieron buenos trabajos.
A pesar de todo lo bien que le iba, Armando Rabe, había dejado su amor, Marta Hoffner en Brasil. Ya habían pasado dos años desde la despedida y después de tanto tiempo volvieron a encontrarse, pues Marta, decidió emprender viaje hacía la tierra donde se encontraba Armando. Allí, en San Bernardo, se casaron y tuvieron tres hijos: Ana, Martín y Gerda.

LA OMA TRABAJADORA
Marta Hoffner de Rabe (La Oma) era muy trabajadora. Se dedicaba al cultivo de algodón y además realizaba todas las tareas del campo: sembró de todo, crío vacas, gallinas, aves de corral y chivos. En ese tiempo había muchas plagas, especialmente de langostas que devoraban todos los cultivos. Por eso para espantarlas hacían ruidos con latas y bolsas, porque no había venenos. Ella para transportarse usaba una volanta tirada por burros.
En la década del cincuenta, Armando decidió separarse de la La Oma y viajó a Buenos Aires junto a su hijo Martín. Las otras dos hijas, Ana y Gerda, se fueron del monte chaqueño. Ana tuvo como destino los Estados Unidos, mientras que Gerda consiguió trabajo como secretaria del doctor Esteban Alejandro Mauro (quien venía desde Mendoza a trabajar en Chaco). Gerda veía seguido a su madre Marta, pero igualmente La Oma pasaba gran parte de la semana sola en compañía de su entrañable amigo: el lorito Pedro.

Y UN DÍA SE HIZO HISTORIA Y CANCIÓN
La década del setenta fue muy importante para el folklore nacional. Los artistas de este género viajaban por todo el país dando a conocer su música. Por eso en 1975, el mendocino Daniel Altamirano llegó a San Bernardo junto a su grupo Los Altamirano compuesto por él y por sus dos hermanos Julio y Mario. En Chaco fueron a visitar a su coprovinciano el doctor Esteban Mauro. En uno de sus viajes, el doctor Mauro, le pidió a La Oma que prepare un chivito para agasajar al grupo. Así el 25 de mayo de 1975, el doctor Mauro y Los Altamirano recorrieron cinco kilómetros, pasando por picadas bordeadas de árboles hasta que llegaron al rancho de barro, apuntalado con quebracho colorado donde vivía La Oma.
Al regresar, Daniel Altamirano se sintió inspirado por la forma de vida de Marta y decidió componer un bello poema. Más tarde el compositor Pedro Favini (tucumano) integrante del Trío San Javier le añadió música con ritmo de chamamé y en el año 1977, el grupo Los 4 de Córdoba (integrado por Víctor Godoy, Héctor Pacheco, Eduardo Márquez y Américo Albornoz) estrenaron el tema, logrando un éxito rotundo y convirtiendo esta canción en una de las más populares del repertorio folklórico argentino.


AHÍ NO TERMINA LA HISTORIA
El año 1994, fue muy particular para Marta Hoffner de Rabe (La Oma). Ese año, el Congreso de la Nación la reconoció como mujer sobresaliente del año.
Pero como todos la Oma era mortal y el 19 de noviembre de 1994, a las 6:15 horas, con 87 años de edad, su vida finalizó. Sus restos descansan en el cementerio de San Bernardo.
Sin duda alguna, la sencillez, el esfuerzo y la voluntad de esta mujer, la dejaron grabada en la historia e inmortalizada en una canción. Como ella, existieron, existen y existirán muchas mujeres que dedican su vida al campo y que viven en ranchos humildes y muy acogedores. Aquí está este Chamamé llamado La Oma, para que lo puedan escuchar y disfrutar, en su versión más popular interpretada por "Los 4 de Córdoba"
Fuente de información:
http://www.raicesdelfolklore.com.ar/mitos-leyendas-y-creencias/600-la-oma.html

Daniel Altamirano sostiene: "Grande es esa alegría que veo brotar en el público cuando comienzo la canción diciendo: La Oma es una mujer/, de setenta y pico de años"....vive en el monte chaqueño,/ cerquita de San Bernardo./ Tiene los ojos azules,/ como el agua de los mares,/ porque vino de muy lejos/ y el cielo quedó en su sangre./ Hay que entrar por las picadas/ para llegar a su rancho,/ de barro y apuntalao/ con quebracho colorado./ Lleno de árboles el patio/ y herramientas de trabajo,/ una volanta, un arao/ y el paisaje de su Chaco./ La Oma es feliz con poco/ digamos que es mejor con nada,/ La Oma era rubia y se ve/ que era una linda alemana./ Que sola que está La Oma, pero ella no piensa en nada,/ como pensar en la muerte, si La Oma es como un hada./ En su ranchito de barro/, calienta a leña su pava,/ conversa con un lorito/, que es con el único que habla...

3 comentarios:

mariarosa dijo...

Que linda historia. Siempre imaginé que la letra de esa canción era verdadera, pero nunca tuve la certeza hasta hoy.
Gracias por tan lindo regalo.

Hoy es el día de la poesía y esta historia de vida es toda ella un poema.

mariarosa

Alicia Abatilli dijo...

Hermosa historia, no la sabía, creí que era una historia cualquiera, la que vivimos en la mesopotamia.
Mi vieja es descendiente de alemanes, cada vez que la escucho, a esta canción, se me llenan los ojos de lágrima, porque vivía así, como describe la letra, hasta que me la traje a vivir conmigo, mujeres patria, eso son.
Feliz vida, feliz día de la Poesía.

Unknown dijo...

Bella historia de una mujer sufrida y trabajadora como tantas; imagino que el reconocimiento del gobierno le habrá llegado en vida.
Gracias.