Frente al misterio estoy, de nuevo alerta...
Frente al misterio estoy, de nuevo alerta,
frente al amor quizá, frente al oscuro
despertar sin urgencia y sin apuro.
pero la mano tiembla ante la puerta.
Yo creía estar muerta. Yo estoy muerta:
nada hay en mí tan cierto o tan seguro.
Pero crece mi sombra contra el muro
y la mano se extiende. Y está abierta.
¿Cómo será su amor –amor– conmigo,
cómo ha de ser: espectador, testigo
o superado actor del viejo drama?
¿Cómo será ese afán que me despoja,
su esperanza, su grito, su congoja,
y cómo las cenizas de su llama?
No hay comentarios:
Publicar un comentario